Arraya tiene alma: ¡se ve, se siente, se vive!
Construido en el siglo XVI en la plaza del pueblo de Sare, Arraya es un antiguo relevo compostelano transformado en un hotel con encanto desde 1951.
La familia Fagoaga la regenta desde hace 3 generaciones.
Formado por tres casas muy antiguas agrupadas en torno a un jardín que escapa a la vista, Arraya se encuentra en el centro de Sare, uno de los pueblos más bonitos del País Vasco.
Nada más entrar en la casa, encontrará hermosos salones y un delicioso comedor con un encanto que debe mucho a la pátina de los muebles y al brillo de las flores del jardín.
En el País Vasco, una casa no se puede apropiar... se transmite de una generación a otra y es con este espíritu que la familia Fagoaga le da la bienvenida a su casa, compartiendo con usted el amor por su casa.
La aventura de Arraya comienza con la historia de un hermano y una hermana, Paul y Louise. Con la ayuda de sus padres, transforman su modesta casa en un salón de té. El año era 1951. Unos años más tarde, en 1962, el restaurante se amplió a la casa vecina, a la que siguieron 6 hermosas habitaciones, cada una con su propio baño: ¡muy vanguardista para la época!
Arraya fue un gran éxito desde el principio. Hay que decir que Paul Fagoaga y su hermano Jean, reputados pelotaris, eran muy conocidos en aquella época.
En 1982, se abrió la tienda Arraya y fue la prima de Paul, Maité, quien tomó las riendas, y cada año se añadía una nueva piedra al edificio: el amor de la familia Fagoaga por esta casa nunca decayó y se transmitió a la siguiente generación con toda naturalidad.
Desde 1995, Jean-Baptiste y Sébastien Fagoaga, hijos de Paul, han tomado el relevo bajo la atenta mirada de la generación anterior, por supuesto. Acompañados por sus esposas, Laurence y Lorentxa. Arraya sigue avanzando mientras se adentra poco a poco en el siglo XXI...
En 2003 y 2006 se renovó por completo la segunda planta del hotel y se abrieron las habitaciones Privilege.
En 2011, se abrió una nueva boutique: Akoka.
En 2015, el edificio original se agita un poco: ¡Arraya tiene ascensor! El jardín fue completamente rediseñado para crear terrazas que invitan a relajarse en los días soleados. Los nuevos equipamientos dan lugar a las últimas habitaciones: Prestige...
En 2016: ¡Obtención de la cuarta estrella!
Le espera una acogida amable y sencilla por parte de uno de los miembros de la familia: la calidad del servicio está en el centro de la tradición desde hace 3 generaciones.
¡Nos vemos pronto en el País Vasco!